Murieron. Después de todo lo sucedido, Bianca no puede creerlo. ¿Por qué? ¿Por qué cada vez que logran superar un obstáculo se dan de bruces con otro? Ahora se enfrentarán a algo que ninguno de los dos se imaginó jamás: Lucas es ahora un vampiro, y Bianca ahora es un espectro. Ninguno de los dos es común en su respectivo caso: Lucas es un vampiro al que se le complica más que a los otros el controlar su sed de sangre; y Bianca es un espectro poderoso, alguien nacido para ser espectro y que posee poderes que los otros espectros no tienen.
Desesperados por ayudar a Lucas, Bianca, Lucas, Balthazar, Vic y Ranulf vuelven al lugar donde todo esto empezó: La Academia Medianoche. Como era de esperarse, Lucas no es bien recibido por los vampiros, a excepción de una: la señora Bethany; y no solo es bien recibido, sino que además la señora Bethany en persona se vuelve su protectora. Bianca no se lo cree. Ella sabe que detrás de esa actitud de la señora Bethany hay algo malo, pero no se imagina qué tan malo.
¿Por qué la Academia Medianoche está abarrotada de trampas para espectros? ¿Por qué la señora Bethany ha atraído a los espectros a Medianoche? ¿Qué pinta Christopher en esto? ¿Podrá Bianca cumplir con las espectativas que tienen los espectros en ella? ¿Lucas logrará superar su incontrolable sed?
Nota: el quinto libro de la serie, Balthazar, ya no trata sobre la historia de Bianca y Lucas, sino sobre la del propio Balthazar. Este libro aún no sale a la venta, por lo cual las reseñas de la saga Medianoche, por el momento concluyen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario